Hashem es un término hebreo que significa literalmente ‘el nombre’. Se utiliza para evitar nombrar el nombre de Dios (YHWH) del pueblo judío.
Otras maneras de evitar nombrarlo es con el tetragrama YHWH (formado por las letras hebreas yod hei vav hei) y con la palabra Adonai (‘Señor’).
Se denomina simplemente así, para preservar el tercer mandamiento entregado por Dios al profeta Moisés, el cual advierte de no pronunciar el nombre sagrado en vano. El tercer mandamiento se puede leer en el texto Deuteronomio 5, 11: «No tomarás el nombre del Señor tu Dios en vano; porque Dios no dará por inocente al que tome su nombre en vano».
También se puede observar este mismo mandamiento en el texto Éxodo 20, 7.
Además, H' (Hashem) es la manera que tiene el judaísmo de afirmar que el único nombre que identifica realmente a su Dios es aquél que ni siquiera lo nombra, pues consideran que nada existente abarca la realidad de Dios. En muchos textos judíos en español no se encuentra la palabra «Dios» completa, sino que sustituyen la i o la o por una diagonal (D\os o Di\s) de modo que el lector ni siquiera piense en la palabra «dios» en vano.
Otras interpretaciones atribuyen a Hashem, el significado de "Yo soy", que es lo que respondió la divinidad a Moisés, cuando éste le preguntó por su nombre ante la zarza ardiente de Horeb. (Biblia)
Fuente Wikipedia